Nuestra parroquia de la Consolación quiso celebrar, el pasado dos de febrero, de una manera más especial este año la fiesta de la Presentación del Señor en el templo y la patronal de la Provincia, Ntra. Sra. de la Candelaria, a la que pertenece la comunidad de religiosas que atienden pastoralmente esta comunidad parroquial.

Quisimos también celebrar el día de la Vida Consagrada, una jornada en la que la Iglesia nos llama a todos a orar por los religiosos y religiosas, frailes y monjas, que han sido llamados a seguir más de cerca a Jesús para estar con Él.

Presidida por el Vicario de la Provincia de los agustinos recoletos en España, en el altar estuvieron los cuatro religiosos de nuestra comunidad parroquial. En un momento de la celebración, tras la breve homilía, nuestro hermano Julián invitó a los religiosos a dar ante los feligreses su testimonio de vida como consagrados al servicio de la Iglesia, que entre los cinco que estaban en el altar sumaban más de un centenar de años como consagrados. Curiosamente, los cuatro religiosos que trabajan pastoralmente en nuestra parroquia han estado buena parte de sus vidas en tierras de América Latina misionando por esos mundos de Dios.

Hubo, a pesar de ser día laborable, una notable asistencia de feligreses a la celebración y todos expresaron su agrado por esta celebración tan peculiar.